Decir Grecia es sinónimo de alegría; alegría por vivir. La transmisión de la armonía y el lujo; la producción de trigo, el cultivo de la vid y del olivo (la llamada triada mediterránea); las colmenas, la pesca, la alfarería, la orfebrería, el comercio, la industria y la democracia, son la prueba y el legado de una civilización moderna, llamada minoica - por el rey Minos -, asentada en Creta, cimiento pretérito de las sociedades actuales y de una cultura, la griega, que miraba hacia la isla como el origen de sus mitos y de sus costumbres.
Mientras tanto
Mientras los soberanos guerreros de Mesopotamia y Egipto intentaban unificar mediante la conquista ciudades rivales e imponer su autoridad, en la isla de Creta, en el mar Egeo, floreció una civilización original a partir del III milenio a.J.C.
Mientras que las construcciones arquitectónicas mesopotámicas tenían la función protectora ante los enemigos y el sol, los palacios cretenses se abrían a la luz y al paisaje. Los palacios eran el centro de la economía y de la religión donde se almacenaban los alimentos y excedentes de la producción agrícola, los impuestos en especie, el lugar donde trabajaban los artesanos. Por ser tan importantes hablaremos de ellos en otra ocasión.
Mientras los faraones y ejércitos acadios guerreaban para rechazar las migraciones de los invasores, Creta ofrecía al mundo mediterráneo y al Próximo oriente los productos de su comercio, tejidos y agricultura. Así pues los cretenses, probablemente el pueblo más pacífico de la alta antigüedad, aportaron durante más de cinco siglos la novedad de una civilización basada en el arte de vivir y en el compromiso de enseñar.
¿Cuáles fueron sus secretos? Una respuesta se encuentra en la imagen de esta entrada; para mí uno de los mayores aciertos de los cretenses fue la igualdad entre hombres y mujeres.
Y llegó el macho dominante
La mujer ocupaba un lugar importante en la sociedad y gozaba de una relativa libertad mientras que, en otras civilizaciones del mismo periodo, estaba sometida por el hombre. Las sacerdotisas desempeñaban un papel preponderante y las mujeres que participaban en actividades públicas, como el teatro o los juegos taurinos, eran reconocidas y representadas en los frescos que cubrían los muros de los palacios –otra vez los palacios -
El ideal atlético que compartirían la Grecia arcaica y la clásica, era también un rasgo de la cultura minoica: se representaban combates de boxeo, luchas y sobre todo juegos del toro en los que participaban hombres y mujeres.
La religión minoica consagraba un culto especial a la fecundidad y a la fertilidad, por tanto a la mujer, y las diosas de caderas anchas y senos redondeados remiten a un culto vinculado a la tierra nutricia. Por desgracia todo tiene su fin y el de la mujer, paradojas de la vida, llegó con la aparición de la gran Grecia que conocemos.
La lucha de las mujeres por la igualdad
Desde su participación en la Unión Europea, Grecia se ha modernizado. La mujer Griega se encuentra entre la espada y la pared, entre la modernidad y la herencia cultural. Las féminas de la polis Griega estaban sometidas al varón ya fuera hombre, padre ó marido.
Aunque pocas, algunas fueron capaces de plantar batalla al machismo. Por ejemplo, Diotima de Mantinea fue una filósofa que jugó un papel importante en el Banquete de Platón; Sus ideas son el origen del amor platónico. Kalipatera fue la primera mujer en participar, en secreto, en los Juegos Olímpicos.
Salvo raras excepciones, lo normal es que la mujer desempeñara el trabajo de ama de casa. Marilun Arthur escribió que aunque los dioses griegos dejaron de odiar a los hombres no dejaron de odiar a las mujeres.
En el siglo XIX aparecieron los primeros movimientos de la mujer con una idea clara, su derecho a la educación. Entraron por primera vez en las universidades pero, ya en el siglo XX, la revolución por la igualdad se vio truncada momentáneamente al comenzar la Segunda Guerra Mundial. Su lucha siguió, ganando el derecho a voto en 1952.
El año decisivo para la mujer griega fue 1980. Caída la dictadura militar (1974), subió el Movimiento Socialista Griego y la primera dama , Margarita Papandreu, propició el resurgimiento de una generación dormida que desafió las ideas tradicionales griegas entre hombres y mujeres.
Hoy en día Grecia sigue eliminando las formas de discriminación contra las mujeres.
Ratificó el articulo 119 del tratado de Roma y la convención de las Naciones Unidas sobre la eliminación de todas las manifestaciones sexistas arraigadas a muchos aspectos de la vida.
Conclusión
Han pasado cinco mil años desde la necesaria convivencia entre sexos, vista por los habitantes de una isla. Estoy convencido de que cada vez serán más los paises que dejen sus gobiernos en manos de las mujeres, de esas compañeras, personas con la visión particular que hicieron grandes a civilizaciones pretéritas; la realidad dentro del mito.
* Estoy eternamente agradecido a Miguel Angel Maca por su articulo, su prestación y colaboración a este humilde blog. La historia siempre es necesaría para comprender las costumbres de un país.
Si os quedais con ganas de más, Miguel Angel tiene un podcast en el que podemos disfrutar de la historia de forma amena, divertida e interesante.
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